Aquiles y Mozart
Jueves, 12 de abril de 2018 - 12 pm Un dueto de violines tocando Mozart, con su complejidad, elegancia y técnica sutil; con su interpretación perfecta y sin añadiduras. Solo el de los pies ligeros es el que conoce cual es -con exactitud- el punto de contacto para lograr que las cuerdas vibren; el guerrero con la técnica apropiada para un pizzicato impecable; e lla es un perfecto violín, y él es el único que conoce bien cómo tocarlo. Los héroes invocan a sus dioses a la hora en que pisan la sombra de su cabeza sobre la arena. <<Que Aquiles luche por honor (...). Y luego que los dioses decidan a qué hombre otorgan su gloria>> . Afrodita no favorece más a Paris, pues ahora es aquel, el de más hermosa figura quien se ha ganado su gracia. Esta es una batalla que no requiere escudos, ni armaduras; o areté, o gloria; solo pasión, y entrega; y confianza, y fuerza. Oh Pelida , gran guerrero, has reclamado el botín: la espléndida Briseid